La Agencia de Calidad de la Educación anunció que la prueba Simce para 4° básico se aplicará este miércoles 20 y jueves 21 de noviembre en todo el país.
La medición que inicialmente estaba fijada para el 5 y 6 de este mes, fue suspendida el pasado 29 de octubre debido a la crisis político social que estalló el 18 de octubre.
Según indicó el organismo, llevar a cabo el Simce y los Cuestionarios de Calidad y Contexto se vuelve especialmente necesario e importante este año.
Ello, explicó, porque los cuestionarios que se envían a estudiantes, profesores, directores, padres y apoderados serán un insumo fundamental para conocer cómo los estudiantes han sido afectados en materias como convivencia escolar y formación ciudadana en las últimas semanas.
Segundo, agregó la agencia, esta medición de aprendizajes permitirá aproximarse al impacto que los hechos ocurridos han tenido en los aprendizajes en Lectura y Matemática. Ambos insumos son útiles para diseñar las medidas remediales pertinentes que deberán elaborarse para enfrentar esta situación y asegurar el derecho a la educación.
Además, la situación del país requiere que la aplicación sea flexible. “La aplicación flexible implica que el Simce que se aplicará esta semana será solo para fines de diagnóstico e investigación y, por las condiciones especiales en que se tomará, no tendrá consecuencias para las escuelas”, indicó el secretario ejecutivo de la agencia, Daniel Rodríguez.
La agencia también indicó que las comunidades viven situaciones diversas y la agencia se adaptará y tomará todas las providencias necesarias para buscar las mejores soluciones.
“La seguridad y el bienestar de los estudiantes es la principal preocupación de cada comunidad educativa y también la nuestra, por lo que nos ponemos a disposición de lo que estas requieran para llevar a cabo la aplicación de forma exitosa”, enfatizó.
Finalmente, la agencia destacó que el Simce y los Indicadores de Desarrollo Personal y Social contribuyen a generar un diagnóstico acerca de la calidad de la educación, pues son la principal herramienta de evaluación externa a los establecimientos educacionales, entregándoles información relevante a las comunidades escolares sobre los aprendizajes esenciales del curriculum nacional. Son también un insumo central para la elaboración de políticas públicas.