Polémica generó la denuncia de la empresa forestal Arauco, que acusó a Carabineros y a las Fuerzas Armadas de no acudir a un sector de la comuna de Curanilahue, en la Región del Biobío, donde se grabó a un grupo armado que, minutos antes, habría destruido vehículos y maquinaria.
Tal como quedó registrado por cámaras aéreas, los sujetos se trasladaban a bordo de dos camioneta e, incluso, se tomaron un tiempo para almorzar.
“Para las 10 de la mañana ya habíamos alertado a las Fuerzas Armadas sobre el ataque, incluyendo la posibilidad de seguir mediante sistema GPS la camioneta que robaron”, manifestaron desde la celulosa, según consignó Radio Bío Bío.
Además, complementaron que “a las 11, les informamos sobre la ruta de escape que estaban utilizando, y a las 13:30 llegaron a las cercanías de Cañete. Fueron más de tres horas de rastreo de sus movimientos. En este lapso incluso se dieron el tiempo para detenerse a comer en una especie de picnic”.
Al tanto de esta situación, el ministerio del Interior anunció que se pedirán explicaciones. Al respecto, el subsecretario Manuel Monsalve indicó que “ninguna institución en Chile está ajena a tener que dar explicaciones con respecto a su desempeño. El Gobierno ha decretado un Estado de Excepción en la provincia de Arauco, en la provincia de Biobío y en la región de La Araucanía. La presencia de las Fuerzas Armadas y el trabajo conjunto con las policías es para actuar de manera oportuna y para garantizar seguridad a las personas”.
“A mí me merece una explicación lo que ocurrió en la provincia de Arauco”, sentenció.